Quires ver el sol al atardecer.
Sueñas con recoger nubes en puñados de diez,
pero solo tienens un momento de paz...
un instante fugaz que no volverá jamás.
Mientras el sol brilla sin intensidad,
vuelas por la mente de la eterna soledad,
allí, en el punto ciego de toda humanidad,
donde no sabes si estas vivo o muerto.
Sin embargo, este viaje no es gratis,
y en cualquier momento la gravedad te puede atrapar...
golpeando tus desplomados huesos contra el suelo,
estallando en tu interior como una bomba de tiempo.
Recuerda que la vida se compone solo de momentos,
y el único verdadero es el presente...
por eso vive al máximo,
pero no sueñes en exeso.
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