viernes, 14 de enero de 2011

Identidad

Vertí mi tiempo en aprender,
crecí con ilusiones y pasiones,
y volé, hasta donde se nos esta permitido a los humanos...
Como Icaros, fui al sol sin pensar que podía caer.

Mis alas se quemaron, 
y junto a ellas parte de mi ser...
pero caí en un manantial,
y sané mis heridas...

Y tu, sombra maldita, me hiciste tu discípulo viendo mi calvario,
admirando la inocencia de mis estrellas,
y logrando que me aferrara a una causa que no es la mía...
Te seguí y apoye, porque eras mi maestro...

Pero la tormenta por fin se desató,
y hoy veo la oscuridad de tus ojos,
la manipulación que la bestia ejerce sobre los corderos asustadizos....
haciendo creer que eras el camino real...

Siempre me ha costado destruir lo que con amor consigo,
pero debo hacerlo, pues no es sincero ni reciproco.
Solo debo agradecer toda la fuerza que vertiste en mi,
pues ya no tengo miedo de pelear, menos contra ti...

Y desde hoy seré mi propio sol,
y me encargaré de iluminar y quemar la semilla que esta germinando...
No es una guerra en tu contra,
es una guerra declarada en honor a la memoria...

Entiéndeme bien,
estoy declarando contra esa oscuridad,
pero no seguiré el camino que me has enseñado,
y no utilizaré, las artimañas de un desvergonzado...

Es ahora donde estoy existiendo,
pues la sombra se ha vuelto un hombre,
el que será capaz de escupir en tus huesos...


No hay comentarios:

Publicar un comentario