Las hojas comienzan a marchitarse,
frente a la puesta de tus ojos...
El comedor se hace gigante,
mientras la luz comienza a irse.
Miles de puertas a lo largo del pasillo...
un solo sentido... avanzar...
Cada oportunidad conlleva un sueño...
cada sueño... a tu propia felicidad.
Mientras las tablas crujen,
tu decisión aumenta,
mientras te levantas...
te vas llenando de fortaleza.
No importa realmente el camino,
tan solo el empeño con que lo cruzas,
tampoco el tiempo en que te demoras,
solo las enseñanzas que incorporas...
La vida pasa y hay que atreverse a vivir,
Nada se moverá de su lugar, si no te atreves.
Vuelve al mundo real...
Nunca dejes de soñar...