Callan las estrellas su polvo estelar,
los rios comienza a invernar,
los arboles su follage cambiar,
y el vidrio de mi ventana se comienza a empañar.
El cielo comienza a llorar,
y yo recostado sobre mi cama oigo el sollozo...
me vuelvo nostalgico y fragil...
tu me haces falta en esta tarde de otoño.
Dibujo en el aire tus manos arropando las mias,
mientras comienza a sonar nuestra melodia,
la misma que te cante al oido cuando esbozabas una hermosa sonrisa...
el mismo dia que me atreví a estar contigo.
Me vuelvo hacia mi una y otra vez...
Un atardecer gris, sin compañia más que la soledad,
Mi tarde perfecta es posible crear,
si a tu lado puedo estar.
